Históricamente
en Marcala, su gente no “hemos disfrutado” al máximo todos los diferentes
paseos y sitios turísticos que tenemos,
no apoyamos eventos que se hacen frecuentemente, siempre veo las mismas
caras; nos cuesta pasar un par de horas disfrutando de paseos como el recién
restaurado “Meza Cálix” que ya pasó a la historia, o ir a la chorrera; hay un
pozo de agua termal en el desfiladero cerca del Instituto 21 de Octubre y nadie
se ha preocupado por hacerlo turístico; aún en semana santa la gente no sale a
excepción del jueves santo que las personas no caben en los diferentes
balnearios.- Yo viví varias décadas en Tegus y por lo menos donde residí, la
gran mayoría de mis vecinos y yo, teníamos la costumbre de visitar o salir a
algún lugar los domingos, creo que es una sana costumbre que muy pocas familias
en este lugar practican, yo he visto a los Galeas (los dueños de radio Marcala,
tal vez ustedes lo conocen) disfrutar toda la familia del parque de Marcala que
creo, no le sale ni caro, ni se necesita transporte, ni hay que ir tan
largo. En semana santa, cuando “éramos
jóvenes y bellos y todos nos querían” nos poníamos como meta, salir todos los
días e ir a diferentes lugares y por las noches hacíamos fogatas de tal forma
que pasábamos muy entretenidos.- En una de esas tantas y como lo hicimos varias
veces nos fuimos de excursión al “chiflador”; no es como ahora que el carro te
deja a cinco minutos del chorro, no, la
“camellada”
(caminada)
era de varias horas pues dejabas el carro en la carretera que conduce al
Salvador y desde allí eran como tres horas a pie (salíamos lo más tarde a las
nueve); los grupos eran heterogéneos, era para cualquier intrépido que quisiera
aventurarse, de cualquier edad.- Una de las más memorables que recuerdo fue la
que organizaron los hermanos Osorio Chicas y el guía era Nelson Osorio que tal
vez tendría unos catorce años y logró reunir a unos veinte excursionistas, eso
sí, que seguirle el paso aunque jovencito “era yuca” (difícil).- En ese grupo
iban algunos que no tenían nada de experiencia porque vivían en otras ciudades
o como las hermanas Rivera Delcid (Lizette y Albania) que creo fue la primera y
última vez que formaron parte del grupo y que solo lograron llegar hasta una
piedra como a quinientos metros del chorro.-Otros por no seguir a Nelson,
terminaron a mitad del barranco, perdidos y gritando para que los fueran a
rescatar.
Continuará…
Publicado por El Marcalino
Edición 320, 08 de octubre del 2013.
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