A finales del 2009, el comandante Fidel Castro
advertía en sus reflexiones, que si el golpe de Estado en Honduras no se
revertía, vendría una oleada de golpes similares en América Latina; luego, el
golpe no se revirtió y el pueblo paraguayo es la nueva víctima del golpismo
oligarca de aquel país hermano y del imperialismo norteamericano. Por cierto,
que no se confunda nadie haciendo de esto una premonición de Fidel, solo se
trata de la lectura que un revolucionario de su dimensión es capaz de hacer
sobre el acontecer político internacional.
Ya los paraguayos y la comunidad internacional están
haciendo lo propio frente a esta nueva crisis y no es el propósito de este
comentario; sí me parece cuando menos necesario, aprovechar ese evento para
hacer valoraciones sobre el acontecer nacional. En particular frente al golpe
del 2009 y la conducta individual y colectiva del pueblo hondureño durante los
últimos 3 años.
La contundencia de la reacción popular desde la fecha
del golpe hasta la liberación y despedida de Mel en enero 2010, no tiene
parangón en la historia nacional. Sin embargo, después de 150 movilizaciones
diarias en esos 7 meses, no se puede decir lo mismo en los meses posteriores
hasta la fecha y no estoy haciendo un reclamo; es obvio que no se podía
mantener aquel nivel de movilización durante 3 años continuos.
Lo que me parece obligado observar es la conducta de
muchos anti-golpistas que acompañaron las movilizaciones iniciales y después,
poco a poco fueron abandonando al pueblo en su lucha, algunos para asumir una
posición pasiva sin abandonar la bandera de una Honduras diferente, lo cual se
entiende bien, pero lo inaceptable es que hay otros y no son pocos, que
“perdieron la memoria” en muy poco tiempo y ahora hacen comparsa con el
golpismo de cara a las próximas elecciones.
Me refiero a aquellos (as) que “están haciendo la
revolución” desde el congreso y desde posiciones en el poder ejecutivo, también
a aquellos (as) que disfrutaban sentirse rodeados de pueblo en el movimiento de
resistencia pero que no soportan la idea de alejarse del poder oligárquico
porque siempre les ha ofrecido algún tipo de protección a sus proyectos
familiares.
Pues bien, el golpe en Paraguay también nos está sirviendo
acá para recuperar la memoria en aquellos (as) que no han entendido que las
oligarquías nacionales y el imperialismo son una misma cosa en todas partes y
que ningún cambio ocurrirá en favor de nuestros pueblos si estos no arrebatan
el poder a las clases dominantes de cada país.
Y la historia tiene sus caprichos. Ese golpe en el
cono sur coincide con el mismo mes de junio cuando en Honduras se conmemorará 3
años de lucha y la construcción de un vigoroso movimiento social y político que
avanza seriamente hacia la toma del poder político. Este 28 de junio el FNRP ha
convocado a movilización en todo el país y 3 días más tarde, la compañera
Xiomara Castro lanzará su candidatura a la presidencia del país por el Partido
LIBRE y para la refundación del Estado.
Salud,
pueblo resistente.
Jorge Barralaga
Publicado por el Marcalino
Edición 256, 26 de junio
del 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario