Por: Lorena Melghem.
Con la reciente firma de un Pacto de Unidad Liberal
refrendado por los 7 aspirantes a candidatos a la presidencia, esta institución
política, la más antigua en
Honduras, comienza a levantarse
luego de la profunda crisis en que quedó sumida tras los hechos del 28 de junio
de 2009.
Aunque
se vieron las mismas y gastadas caras, el hecho de atender la convocatoria es una muestra de los esfuerzos por unir las
piezas de un Partido que aunque ya presentaba un alto grado de erosión y anacronismo, después del Golpe quedo como un rompecabezas
con muchas piezas dispersas y confundidas.
El
Golpe de Estado perpetrado al Gobierno Liberal de Manuel Zelaya desquebrajó más
a este centenario Partido, cuyos últimos
dirigentes se distinguieron por sus poses caudillistas y en su afán por
defender sus propios intereses han
alentado la creación de una serie de “Corrientes” con más poder que la
misma Institución, en desmedro de la coherencia partidaria y de la ideología
original.
A
pocos meses para las elecciones internas, el Partido Liberal comienza a
“agarrar aire” y la Casa del Partido donde después del golpe no se miraban ni
fantasmas, volvió a albergar a los mismos dirigentes y activistas de antaño,
que gritaron las consignas y
mensajes de siempre, pero al menos se
recobró la “bulla” y en muchos seguidores que después del derrocamiento del
liberal Mel Zelaya quedaron indignados y confundidos, se alentó la fe y la esperanza en un nuevo
triunfo.
El
toque diferente lo quiso poner el ex
dirigente de la diócesis de Copán Obispo Emérito Luis Alfonso Santos, quien con
un tono más de religioso que de político quiso llevar el mismo mensaje de la
doctrina social de la iglesia y su opción preferencial por los pobres, pero las
“barras bravas” no
lo dejaron, por
lo que ante
las expresiones de rechazo opto por entregar el micrófono.
Quedo
claro además que el precandidato Yani Rosenthal tienen capacidad de
movilización ya que fue el que llevo más
activistas a la sede del Partido por lo que fue el más vitoreado, demostrando
un poderío económico y caudal político heredado del banquero Jaime Rosenthal ,
su padre, quien ha participado como
precandidato en varias contiendas sin lograr ningún triunfo.
Aunque
la gente ha estigmatizado a los Rosenthal en el sentido de que hay “algo” que
les impide llegar a la presidencia, veremos cómo le va a Yani, joven abogado al
que no se le ha visto mucho “brillo” como diputado en el Congreso de Juan Orlando
Hernández.
Al
otro precandidato fuerte, Mauricio Villeda, lo acompañó una barra más discreta,
se presentó con menos derroche de poderío, tal vez confiado en que también ha heredado un estigma de su padre Ramón Villeda Morales, lo que podría incidir
positivamente para ganar en las internas
la candidatura a la primera magistratura del país.
Por
otro lado ya logró recientemente las
preferencias de los liberales en las anteriores
elecciones internas (2008), ya que fue el que figuró, ante las
inhabilitaciones de Elvin Santos para presentarse como candidato titular, Elvin
le ganó en las Primarias a Roberto
Micheletti, amparándose en Mauricio Villeda
.
Esperemos
que las ambiciones de poder no se antepongan a este primer paso de unidad
partidaria, aunque lo más seguro es que los otros precandidatos: Edmundo
Orellana, Wenceslao Lara, Eduardo Gaugel, y Esteban Handal, terminaran
uniéndose a cualquiera de los dos con opción a ganar, no así el Obispo
Santos que puede llegar hasta el final,
pero una vez que pierda, sus tendencias son más de apoyo al partido LIBRE.
Publicado
por el Marcalino
Edición
248, 1 de mayo del 2012
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