Por Enrique Guzmán.
En la década del 40, muchos marcalinos fueron
transportados a su última morada en el cementerio general de esta ciudad en un
ataúd prestado, ya que la costumbre - en la gente pobre - de enterrarlos en tablas y tapescos, movió la sensibilidad
de un Síndico Municipal quien abogó de manera muy particular a favor de la
dignidad de los difuntos.
Lo anterior se colige de un acuerdo municipal,
emitido por la Corporación de 1947, mientras fungió como Alcalde Municipal de
Marcala, don Eulalio Aguilar, acompañado de su cuerpo de regidores: José María
Reyes, José Concepción Sánchez, Felipe Melgar, Emilio Rodríguez y Dionisio
López. Del Síndico Municipal, Juan Ramón Molina y los concejeros Pánfilo Pérez,
Gregorio Lazo Mejía, Alberto Araujo, Domingo Hernández y Ulises Márquez.
El acuerdo en mención literalmente dice:
9.- A mosión del señor Síndico Municipal, don Juan
Ramón Molina, se acordó: mandar a construir un ataúd que servirá para enterrar
a los pobres de solemnidad, que por suma pobreza, los conducen sus familiares
en tablas y en tapezcos, causando con esto mala impresión, no solamente a la
gente extraña, sino que hasta a nosotros mismos, comisionando al mosionante,
para que conforme el movimiento de las rentas, mande a hacer dicho ataúd, en la
forma que se necesite para el fin humanitario que se persigue; agregando que
dicho ataúd, será prestado al familiar del difundo, para que conduzca a su
deudo al cementerio general y 10.- Se levantó la sesión.”
Después de conocer este singular acuerdo se nos vienen
a la mente algunas preguntas, por ejemplo:
¿Cuántas personas se transportaron en este ataúd?
¿Cuáles serían las medidas? (sirvió para conducir al
camposanto a niños y adultos)
¿Cuánto tiempo se utilizó este medio para transportar
a los difuntos por el centro de Marcala?
¿Por qué se dejó de utilizar?
¿Sería que los carpinteros de la época protestaron
porque no tenían mucho trabajo?
Las respuestas quizá nunca las sepamos, pero sin duda
alguna esta singular determinación contribuyó a que muchos difuntos pobres
fueran transportados al campo santo con mayor dignidad.
Publicado por El
Marcalino
Edición 247, 24 de abril
del 2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario